El héroe misionero de hoy es un misionero del siglo XIX que dio su vida a África. De hecho, su lema era: “África o la muerte”. Se llamaba Daniel Comboni.
Daniel nació el 15 de marzo de 1831 en Italia en una familia pobre. Fue el cuarto de ocho hijos, el único que sobrevivió hasta la edad adulta.
Cuando tenía 12 años, fue enviado a la escuela. Allí, aprendió medicina e idiomas y se preparó para ser sacerdote. Daniel tenía una gran facilidad para los idiomas, así que en la escuela aprendió francés, inglés y árabe. Más adelante en la vida, también aprendería muchos idiomas y dialectos africanos.
El 6 de enero de 1849, Daniel hizo un voto de que se convertiría en misionero en África después de leer un libro sobre los mártires japoneses. Fue ordenado sacerdote en la víspera de Año Nuevo, 1854, y en 1857, se fue a África con otros cuatro sacerdotes.
El 8 de enero de 1858, el p. Daniel llegó a Jartum en Sudán. Su misión era liberar a los niños y niñas esclavizados. Además de encontrarse con un clima inhóspito, sufrió la pérdida de 3 sacerdotes compañeros. También sufría de malaria.
El p. Daniel sintió que era importante educar a Europa y a toda la Iglesia Católica sobre la difícil situación de los pobres en África. Como resultado, hizo viajes a Europa para pedir dinero y educar a la gente sobre las condiciones que encontró en Sudán.
El 1 de junio de 1867, estableció los Misioneros Combonianos del Corazón de Jesús (para sacerdotes y Hermanos), y en 1872, fundó las Hermanas Misioneras Combonianas.
En agosto de 1877, el p. Daniel fue consagrado obispo y sirvió como Vicario Apostólico de África Central. En esta posición, estaba en mejores condiciones para ayudar a sus nuevas congregaciones prósperas.
El 10 de octubre de 1881, el obispo Daniel murió en Jartum durante la epidemia de cólera. Sus palabras finales fueron: “Me estoy muriendo, pero mi trabajo no morirá”.
El 5 de octubre de 2003, el Papa San Juan Pablo II canonizó a Daniel Comboni. La fiesta de San Daniel Comboni es el 10 de octubre.
Hoy en día, los misioneros combonianos se encuentran en muchas naciones de África, Europa, América Central, América del Sur, Asia y Oriente Medio.