Cuando el sacerdote va a celebrar Misa en las muchas iglesias de nuestra parroquia, nunca sabe qué otras cosas puede encontrarse haciendo.
A veces, descubre que tiene un bautismo, o 20, para celebrar. Otras veces, descubre que se supone que debe celebrar la Primera Reconciliación y la Primera Comunión, pero nadie le avisó con anticipación. Otras veces, es llamado a celebrar el Sacramento de los enfermos en lugares remotos de la montaña.
En la foto de arriba, vemos a algunas de las personas de la comunidad que se reunieron en el pueblo de La Libertad, después de la Misa, para bendecir la nueva casa de Jolani Castro.