En esta foto, vemos a algunos de los hombres de Usuyca, Curarén, sentados afuera de su iglesia, Santísima Trinidad, esperando que comience la misa.
A los hombres, especialmente a los jóvenes, les encanta sentarse afuera bajo los árboles o frente a sus iglesias antes y después de las misas. Del mismo modo, a los niños les encanta pararse afuera de la iglesia y ver la misa mirando por las ventanas.
Este fenómeno no es exclusivo de Usuyca; se encuentra en casi todas las iglesias de nuestra parroquia.