Hrna. Dorothy Kazel: Mártir Ursulina de El Salvador

diciembre 3, 2021
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El héroe misionero de esta semana es la hermana Dorothy Kazel, O.S.U.

Dorothy nació el 30 de junio de 1939 en Cleveland, Ohio.

En 1960, se unió a las Hermanas Ursulinas y tomó el nombre de Hna. Laurentine en honor a una Hermana Ursulina que había sido martirizada durante la Revolución Francesa.  Sin embargo, durante la década de 1960, volvió a su nombre bautismal conocido como Hna. Dorothy.

En 1965, después de completar su licenciatura y noviciado, la Hna. Dorothy enseñó durante 7 años en Cleveland y realizó un trabajo misionero con la tribu Papago en Arizona.  Después de obtener su maestría en consejería en 1974, la Hna. Dorothy se unió al equipo misionero de la Diócesis de Cleveland que estaba trabajando en El Salvador.

Hna. Dorothy trabajaba en La Libertad en la parroquia de la Inmaculada Concepción.  En la parroquia, capacitó a catequistas, llevó a cabo programas de preparación sacramental y supervisó la distribución de ayuda y alimentos de Catholic Relief Services.  También trabajó con refugiados de la Guerra Civil Salvadoreña que estaba en su apogeo en ese momento.  A menudo, la hermana Dorothy se encontraba buscando comida, refugio y suministros médicos para los necesitados.  También ayudó a transportar a los enfermos y heridos a los centros de salud.

El 2 de diciembre de 1980, la Hna. Dorothy y Jean Donovan, una misionera laica del equipo de la Diócesis de Cleveland, se dirigieron al aeropuerto de San Salvador para recoger a las Hermanas Maryknoll Ita Ford y Maura Clarke que regresaban de una conferencia de Hermanas Maryknoll en Managua, Nicaragua.  Las Hermanas no tenían idea de que estaban siendo vigiladas por la Guardia Nacional.

Después de recoger a las Hermanas Maryknoll, las cuatro mujeres comenzaron a conducir hacia su destino.  Desafortunadamente, los soldados los detuvieron, los llevaron a un lugar aislado, los violaron, golpearon y asesinaron y los enterraron en tumbas poco profundas.

A medida que se difundieron las noticias de su asesinato en El Salvador y Estados Unidos, se las conoció como las Cuatro Mujeres Mártires de El Salvador.  Hoy en día, los cristianos católicos de todo el mundo recuerdan a estas mujeres como verdaderas heroínas misioneras.

En Reitoca, F.M., Honduras, la casa principal en el campus de Holy Cross se llama Casa de los Cuatro Mártires en honor a las cuatro mujeres.

Hay muchos libros disponibles sobre la vida de estas cuatro mujeres, y todos están disponibles en Amazon.