En este Domingo de Respeto a la Vida, los cristianos católicos leen estas hermosas palabras de la carta de San Pablo a los filipenses:
“Hermanos y hermanas: no tengan ansiedad en absoluto, pero en todo, por oración y petición, con acción de gracias, den a conocer sus peticiones a Dios. Entonces la paz de Dios que sobrepasa todo entendimiento guardará sus corazones y mentes en Cristo Jesús.
Finalmente, hermanos y hermanas, lo que sea verdad, lo que sea honorable, lo que sea justo, lo que sea puro, lo que sea encantador, lo que sea amable, si hay alguna excelencia y si hay algo digno de elogio, piensen en estas cosas. Sigue haciendo lo que has aprendido y recibido, escuchado y visto en mí. Entonces el Dios de la paz estará contigo” (4: 6-9).