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Paola Francesca Di Rosa nació el 6 de noviembre de 1813 en Brescia, Italia, una de nueve hijos. Su padre, Clemente, era un rico empresario y su madre, ama de casa, era la condesa Camilla Albani.
La educación inicial de Paola fue con las Hermanas de la Visitación hasta que su madre murió en 1824.
Desde su adolescencia, Paola exhibió ciertas cualidades que guiarían su vida, cualidades como sensibilidad y compasión hacia los necesitados, un fuerte compromiso con su fe católica, fortaleza de convicciones, talento para la administración, resiliencia, y la capacidad de llevar a cabo sus visiones para ayudar a los demás.
En su parroquia, Paola organizó retiros, misiones y un gremio de mujeres cuando tenía diecisiete años. También rechazó los intentos de su padre de encontrarle un pretendiente, porque decidió que el matrimonio no era su vocación. Un sacerdote que se hizo amigo de ella habló con Clemente y le explicó que Paola quería una vocación diferente a la del estado de casada.
Al final de su adolescencia, Paola empezó a trabajar en la hilandería de su padre en Acquafredda, una ciudad de la provincia de Brescia. Era tan buena trabajadora que fue nombrada supervisora de un asilo para niñas y mujeres pobres. Fue en esta institución donde Paola notó que muchas de las jóvenes no tenían un lugar seguro donde pasar la noche cuando terminaban sus turnos diurnos.
Cuando Paola intentó que los administradores del asilo apoyaran sus planes de abrir una pensión para las jóvenes, se negaron. Entonces, dejó su trabajo y se puso a trabajar iniciando un lugar tan seguro para las jóvenes mientras ayudaba a uno de los hermanos que tenía una escuela para sordos.
En 1836, hubo una epidemia de cólera en Brescia y Paola ayudó a cuidar a los enfermos en el hospital local junto con otras mujeres. Paola también dirigió un hogar para mujeres sordas y mudas. Y en 1848, Paola y sus compañeros cuidan a los soldados heridos en la guerra que asolaba Brescia.
Debido a su trabajo al servicio de los necesitados, Paola atrajo a otras mujeres con el mismo deseo de ayudar a los necesitados. Se llamaban a sí mismas Ancelle della carita, Siervas de la Caridad. El grupo se transformaría en una nueva orden religiosa en la Iglesia Católica. En la vida religiosa, Paola tomó el nombre de María Crocifissa Di Rosa. Murió el 15 de diciembre de 1855 y fue canonizada el 12 de junio de 1954. La fiesta de Santa María Di Rosa es el 15 de diciembre.
Hoy en día, las Siervas de la Caridad sirven en naciones de Europa, África y América del Sur.
